Coca-Cola vuelve a Foster’s Hollywood tras casi 20 años de ausencia, celebrándolo con una campaña de publicidad exterior desarrollada por McCann. La activación transforma los platos icónicos de la cadena en símbolos visuales reconocibles, integrando la curva clásica de la marca de bebidas.
La ilusión óptica que anuncia el regreso
La campaña juega con la onda de Coca-Cola, reinterpretada con ingredientes y texturas de tres platos emblemáticos: las costillas Black Label, la hamburguesa Director’s Choice y el postre Choco Crunchy. Esta fusión visual refuerza la conexión natural entre comida y bebida.
Madrid como epicentro de la activación
El despliegue principal se ubica en el intercambiador de Avenida de América, donde una lona gigante y 10 cubos publicitarios forman un tríptico visible desde distintos ángulos. La ejecución busca sorprender al público con un efecto óptico que combina familiaridad y novedad.
Campaña exterior de Coca-Cola y Foster’s Hollywood en el intercambiador de Avenida de América, Madrid.
Una alianza con valor simbólico
Para Foster’s Hollywood, el regreso de Coca-Cola no solo significa recuperar un producto, sino asociarse con una marca de alto capital simbólico. Según Alexis Chauvin, Director de Marketing de Foster’s, “el producto es el alma del negocio” y debía representarse con toda su fuerza visual.
Tendencia en el sector de alimentos y bebidas
La campaña se suma a iniciativas como “Better with Pepsi” de 2021, donde los envoltorios revelaban logotipos ocultos. Estas reinterpretaciones visuales refuerzan la idea de afinidad natural entre marcas y consumo cotidiano.
Impacto y proyección
Aunque localizada en Madrid, la ejecución tiene potencial de replicarse en otros mercados. Con un presupuesto global de más de 4,000 millones de dólares en 2023, Coca-Cola combina campañas globales con activaciones locales de alto impacto, fortaleciendo su relevancia cultural en cada mercado.
Preguntas frecuentes
¿Qué comunica la campaña de Coca-Cola y Foster’s Hollywood?
La vuelta de Coca-Cola a los restaurantes Foster’s tras casi dos décadas, representada con una ilusión óptica que combina comida y bebida.
¿Dónde se desplegó la campaña?
En Madrid, principalmente en el intercambiador de Avenida de América, con lona gigante y cubos publicitarios.
¿Qué papel tuvo McCann en la activación?
La agencia fue responsable del concepto creativo, desarrollando una propuesta visual potente que mezcla branding global y productos icónicos.
¿Por qué es relevante esta alianza?
Porque refuerza la experiencia integral de comida y bebida, sumando el capital simbólico de Coca-Cola a la oferta gastronómica de Foster’s.
¿Cuál es la proyección de esta campaña?
Aunque localizada en Madrid, tiene potencial de replicarse en otros mercados donde ambas marcas operan.
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